HEXAGRAMA 12 del I CHING o CHOU I
ESCAQUE 57 del
AJEDREZ ORACULAR J.L. Padilla
Corral
P’I 3
FOU 3 (Wade-
Giles y Pinyin)
“LA SUMISION”
“La Grandeza de lo Inexplicable”
Este ideograma Oracular tiene dos fonéticas y dos
significados según el diccionario (*).
La primera
es FOU3 que según (*) quiere decir:
1.
Negar, rehusar, no.
2.
¿No es así? ¿No? ¿… o no?
3.
Desaprobar; inculpar.
La segunda es P’I 3 que significa (*)
1.
Malo. Mal; desgracia; infortunio.
2.
Cerrar; obstruir. Cerrado, bloqueado. No poder
avanzar o tener cargos.
3.
El 12º hexagrama del Libro de los Cambios, que significa estancamiento del principio
creador.
Nos referenciamos en
P’I, viendo el sentido que conlleva el ideograma.
El radical es KOU 3 que significa (*) boca, boca que alimenta; personas
(de una familia); habitantes. Bocado, trago. (Una) inspiración; (una)
respiración. (Un) mordisco (Una) picadura (de insecto). Palabra. Oral.
Oralmente de viva voz. Paso de montaña, desfiladero. Boca, orificio,
embocadura, abertura; paso; puerto; encrucijada; entrada o salida. Brecha;
herida; llaga. Filo; corte de (una espada). (Clasificación numérica de
espadas).
Y el otro ideograma es
Bu4 que significa (*) no, (equivalente a los prefijos)
in-, ni…ni; sin.
El ideograma Oracular nos revela un momento donde
aparentemente no hay una expresión fluida de aquello inexplicable que nos
alimenta y comunica. Es entonces un instante de Sumisión, frente a La Grandeza
de lo Inexplicable.
RADIO PIRATA ORÁCULO LA SUMISIÓN.
21-09-2021
Transcripcion gentileza Loana
J.L. Padilla: Buenas tardes señoras y
señores, bienvenidos a Comunicacionestian 24h y más…
Estamos,
nada más y nada menos que en Radio Rayo… “Radio Rayo” no, no señor, Radio
Pirata, tercera edición. Ya hemos culminado recién la tercera edición de Asalto
Poético. Y esta vez, como ven, con el pirata invisible; el pirata invisible
pero que se hace visible gracias a la magia de la tecnología. Y hoy sí que
estamos en radio, radio, radio. Pero el siguiente programa ya sí que será
todavía más radio, radio, radio. Pero esta vez lo iremos acompañando con
imágenes que los equipos técnicos se encargan de ir proyectando en la medida en
que estamos con ustedes.
Y
Radio Pirata hoy tiene una edición muy especial porque es “Radio Pirata
Oráculo”, ¡guau! Digo “¡guau!” porque es la primera vez que nos atrevemos así,
a hablar del oráculo en Radio Pirata. Y, claro, los piratas somos muy dados a
las magias, a las sospechas estelares, etc, etc. Y hoy, 21 de septiembre es
justamente el equinoccio de otoño aquí en occidente, en el hemisferio norte, y
hemisferio de primavera en el hemisferio sur. Y qué casualidad, ¡qué
casualidad!, que el oráculo del cambio, del calendario oracular de la Escuela
Neijing nos habla de, abajo un ideograma que está integrado por partida,
partida, partida, y arriba un trigrama que está integrado por entera, entera,
entera. Justo, opuestos y complementarios. En concreto es Kun abajo y Chien
arriba. O sea Chien sobre Kun, es decir La Creatividad del Cielo sobre la
Receptividad de la Tierra. Se corresponde con el I-Ching o Chou-I con el número
12, el número 12 del oráculo.
El
Oráculo del Cambio es un texto de recogida del rey Wan y con comentarios
amplificados de Kung-Tse, Confucio, y de, bueno, una Tradición. Que, por
supuesto, ha estado y creo que sigue estando prohibido en la República Popular
China, o no, no lo sé, no lo sé con exactitud, pero sí conocemos la época en la
que estaba prohibido, por ser un libro de brujería, de hechicería y de otras
cosas así tan caídas en desuso y tan condenadas con las eras modernas.
El
caso es que “saltó a la fama”, por así decirlo, cuando Leibniz, el matemático,
descubrió que todo el cálculo de probabilidades estaba impreso en este texto.
Saltó también a la palestra científica… Esto fue en lo matemático pero en la
científica, desde el punto de vista psicológico, saltó a la palestra el I-Ching
cuando Carl G. Jung, el psicoanalista suizo, discípulo de Freud, descubrió que
haciendo el oráculo, interpretaba con mayor precisión, el oráculo, los sueños
de sus pacientes desde el punto de vista psicoanalítico que lo que él podría
hacer. Y, bueno, como muestra de todo eso, lo tenemos básicamente en el prólogo
que hace Carl G. Jung al texto, a una de las traducciones, de Richard Wagner, digo
“Wagner”… el Wigger tampoco… ¡aggg!, que no me sale ahora… Wilhelm, Richard
Wilhelm. Entonces bueno pues en ese texto, fantástico por cierto, de este
sinólogo alemán, Richard Wilhelm hay un largo prólogo de Carl G. Jung que,
desde luego, con independencia de que se conozca más o menos este texto, el
oráculo, con independencia de ello, bien merece la pena leerlo, por la prosa
incisiva y, por momentos misteriosa que exhibe un psicoanalista.
Y
bueno, pues nosotros hemos tomado cada hexagrama, que son 64 hexagramas, y los
hemos llevado al tablero del ajedrez y los hemos dispuesto de una determinada
manera, y hemos asignado a cada escaque un hexagrama y lo hemos hecho
corresponder con unos resonadores de acupuntura. Con lo cual podíamos decir que
en este mes que empieza hoy, desde el punto de vista oracular, los resonadores
que están principalmente activos, según este criterio de la Escuela Neijing,
sería Zhi Biang, “Dirección Constante”, el 54V; Er Men, “Puerta del oído”, el
21SJ; Sang Lian, “Ángulo Ascendente”, 9IG; y Yu Ji, “Espacio del Ser” o “El
Rincón del Pescado”, 10P. Estos cuatro resonadores estarán preferentemente
activados según el oráculo del cambio, el Libro de la alquimia por excelencia,
del Emperador Fu Shi, que es el que da el testimonio, como Emperador mítico o
como quieran ustedes considerarlos, a este enigmático texto. Este enigmático
texto que tiene muchas explicaciones en cuanto a su origen… dicen que el
Emperador Amarillo… ¡digo!, el Emperador Blanco –el Emperador Amarillo es Huan
Di- se subió a una montaña y allí contempló como uno era oscuro, otro claro,
uno bajo, otro alto… y fue discerniendo las líneas partidas como yin y las
líneas enteras como yang. Fu Shi. Y también otros dicen que contempló cómo
salía de un lago en calma una tortuga, y que tenía grabado en su caparazón los
diferentes hexagramas. También se dice –todo esto es cultura tradicional ¿no?-,
también se dice que fue un mensajero de los Dioses a través de dragones, los
que insinuaron todas estas secuencias. Lo cierto es que el contemporáneo como
es el comentarista que hace expresiones más concretas y es ya conocido como
Kung Tse, Confucio, dice que necesitaría más de una vida para poder interpretar
y para poder dar una visión exacta del contenido de este texto. Esto le da una
envoltura enigmática y como misteriosa, ¿no? Pero realmente, como dirían y como
dicen los que se dedican al estudio de este texto, dicen: “Quién conoce los secretos –yo diría “los misterios”-, los misterios del I-Ching, conoce los
misterios de la Vida”, nada más y nada menos. Y, ciertamente, todavía,
sobre todo en Hong Kong y en Taiwán y en algunas zonas de Japón, en Tokio, en
alguna calle en concreto, todavía se sigue consultando a propósito de
problemas, dificultades y diferentes cuestiones a los entendidos del I-Ching. Y
ahí, con las varillas de milenrama se lanzan al azar, y éstas nos van dictando
si es una línea entera o partida, y así hasta completar 6 líneas, como el
hexagrama que nos ocupa este año, o sea este mes, perdón: partida, partida,
partida –Receptividad de la Tierra; siempre se cuenta de abajo arriba- y luego
entera, entera, entera. Y que, casualmente, coincide –como decíamos- con el
equinoccio de primavera en el hemisferio sur, y nosotros entramos en el
hemisferio norte en el equinoccio de otoño.
Y,
bueno, esto es como una introducción general para aquellos que no conozcan o no
se hayan acercado a este texto del que hay multitud… bueno “multitud”, hay
bastantes traducciones. Nosotros seguimos considerando –creemos que conocemos
todas las de occidente y algunas de oriente-, seguimos considerando la de
Richard Wilhelm la más elaborada, las más completa. Y bueno, por ella nos
guiamos a la hora de las lecturas y las interpretaciones.
Hoy,
obviamente, no es el espacio adecuado para describir línea por línea porque eso
ya correspondería a la respuesta de una pregunta. Pero sí la pregunta que nos
hace la Creación desde el punto de vista del I-Ching es: “¿Cómo vamos a asumir… este mes?” Este mes que abarca desde esta
luna llena hasta la luna nueva, hasta la próxima luna nueva. ¿Cómo vamos a
asumirlo?, ¿no? ¿Qué nos dice el Cielo de cómo debemos desarrollarnos? Y ahí sí
podemos entrar ¿no?
Cada
hexagrama tiene lo que se dice un “dictamen” y una “sentencia”. El dictamen de
este hexagrama -de abajo arriba: partida, partida, partida que significa La
Receptividad de la Tierra, y arriba, entera, entera, entera, que significa
Chien, La Creatividad del Cielo- nos dice que el dictamen es “La Sumisión”. Una
palabra que, de entrada, ofrece en la cultura predominante, dominante y
combativa, un cierto rechazo. Bueno, ahora veremos. Y ése es el dictamen. Y la
sentencia es: “La Grandeza de lo Inexplicable”; lo cual no deja de ser otra…
otra parte de lo que decíamos al principio, del misterio de los misterios que
encierra el I-Ching o Chou-I, pero que a la vez se nos abre y nos dice, desde
la óptica que hemos nosotros consultado al I-Ching para todo el año, y que está
publicado en nuestro calendario oracular, cómo van a ser las diferentes
estancias guiados por la luna.
Y,
bueno, cuando se habla de la Sumisión estamos hablando, por una parte, que
tenemos que empezar, o nos dice el I-Ching, nos dice en concreto que tenemos
que apartar la soberbia, el orgullo, la importancia personal y la vanidad;
apartarla. Y si apartamos la importancia personal, la soberbia, la vanidad y el
orgullo, probablemente nos encontremos en el estado de sumisión. Pero una
sumisión “a”, a la Grandeza de lo que ha sido y es creado y es recreado, es
cuidado y desarrollado, como es la Vida en su amplio sentido. Porque,
evidentemente, si no somos soberbios, vanidosos, orgullosos y dones de
importancia personal, nos contemplamos como seres vivos pero contemplamos una
naturaleza del entorno vivo que es absolutamente ¡guau! Sólo contemplar el
reino vegetal por ejemplo, el asombro es… increíble. Y si contemplamos el reino
animal, por generalizar, es asombroso. Y si contemplamos el mundo microscópico
de bacterias y virus, entonces ya estamos descabalados. Por eso, el ser sumiso
nos incita a vivir, no nos da la importancia personal de castigarnos, de
castigar a otros, de vengarnos, de hacer imperdonable tal o cual cosa, de esas
historias que tanto se escuchan en todos los lugares donde habita el ser
humano…
-Pues te retiro el saludo… Pues ya no
quiero saber nada de ti…
Y
todas estas cosas que tiran por la calle de en medio y que dejan ahí un poso de
latido oscuro, fibrilante, ¿no?, que no es saludable, y que tenemos que
recuperar en la medida en que nos sentimos sumisos y entrar en ese tiempo del
Gran Perdón que acabamos de pasar según el calendario hebreo, el Yonkipur, un
Gran Perdón en el sentido de la Sumisión. Una sumisión a la Vida, que es tan
enorme. Entonces no hay como importancia personal, ni como orgullo y vanidad,
necesidad de agredirse, de dañarse, y menos aún de dañar a otros semejantes, y
a la Vida en general. Eso es por una parte.
Por
otra parte, si contemplamos la palabra “sumisión” y hacemos kábala castellana
sobre nuestro idioma, podemos separarla y decir “su-misión”, la misión que
ustedes tienen. Todo ser humano y todo ser vivo para ser más exacto, tiene una
misión en este misterio de la Vida. La rosa tiene la misión de dar su perfume,
su belleza y sus afiladas puntas de su tronco. El pino, el abedul y cualquier
otro árbol nos dan su belleza, su grandiosidad, su altura, su sombra… Todas
tienen, todo lo viviente tiene una misión que cumplir ¿verdad?
Y al
llegar al ser humano, al ser de humanidad, descubrimos, no con poco asombro
–¡no con poco asombro!-, si hemos eliminado esa soberbia, esa vanidad, ese
orgullo, esa importancia personal, que tenemos una misión que cumplir. Pero una
misión, fíjense bien, una misión para la que estamos dotados, que el Misterio
Creador nos ha dado por –cambiando de nivel-, por nuestro genoma, por nuestra
educación, por nuestra cultura, por el lugar donde vivimos… Que todo eso no ha
sido una casualidad, ha sido una causalidad creadora. Venga del Big-Bang o
venga de la casualidad o del azar, ¡me da igual!, ¡me da igual! Lo cierto es
que cada ser humano es un diseño que está debidamente preparado para cumplir
una misión. Y si nos damos cuenta de ello, todavía aún nos hacemos más sumisos
a la Creación porque estamos ante el deber gozoso de cumplir una misión para la
que, insisto, estamos preparados, nos han dotado. Y descubrimos así nuestra
vocación, descubrimos así lo que sentimos que realmente debemos hacer, que
debemos realizar, que debemos testimoniar. Y cuando se siente esa vocación,
musical por ejemplo, y la música nos atrapa, nos recoge, nos atrae, este
instrumento o el otro. Cuando vemos que no podemos evitarlo, estar con la
música, véase esa vocación musical, pues nos sentimos que tenemos evidentemente
además dotes para ello. Igualmente, cuando nos sentimos vocacionados a la
ayuda, a la asistencia, al cuidado de lo que tenemos alrededor, nos
vocacionamos hacia áreas de salud, hacia áreas de cuido en general, de campos,
de estructuras, de lo que sea… que puede representar un cuidado.
Creo
que todo ser humano tiene una vocación, ¡todos!, que muchas veces está muy
tapada por la obligatoriedad que imponen las familias; ahora menos pero antes
si el padre era notario, el hijo tenía que ser notario, ¿verdad? Y eso no deja
de ser casi un karma, ¿verdad? Porque algunos sí, estaban de acuerdo, pero
otros no. Y no es que digamos que el hijo no pueda seguir la estela del padre,
¡por supuesto que sí!, ¡estupendo! A lo mejor, evidentemente, su misión es ésa,
seguir la estela y mejorarla y acrecentarla y expandirla, claro que sí, ¡claro
que sí! Pero lo decíamos antes en el sentido de la obligatoriedad que a veces,
no solamente la familia sino la sociedad impone a los sujetos, hacer una misión
que no es la que les corresponde. Y otras veces –¡no las menos!- la propaganda,
la propaganda y el continuo bombardeo de que tienes que ser así y así y pensar
de esta forma y sentir de esta manera y razonar de ésta otra… Tenemos que
tener, hoy más que nunca, mucho cuidado con eso, para realmente descubrir cuál
es nuestra misión, que se suele esbozar habitualmente en nuestra vocación. Pero
evidentemente, la misión es algo más completo.
Seguramente
que muchos de ustedes recordarán la película “La Misión”, una película para ver
y temblarse un poco… Bueno. Pero eso es una coincidencia del nombre. Pero
interesante… interesante verla, sí, por matices y detalles.
La
característica de la misión es que se siente el ser atraído, profundamente
atraído, amorosamente atraído, enamoradamente atraído por una serie de
factores. En realidad, cuando el sujeto está en su misión, en la que le
corresponde, se enamora de lo que hace, se enamora de lo que es, de lo que le
ha correspondido. Y es precisamente ese amor, que en definitiva es la misión
que tenemos que cumplir todos. Sí, podíamos decir que la misión fundamental que
corresponde a todos los seres vivos y en particular ahora a los seres humanos,
a los que nos estamos dirigiendo, es el amar. Porque en la medida en que
amamos, dentro de nuestras torpezas, nuestras dificultades, pero amar al
completo, amar al completo ese estar en donde estamos, ese hacer en lo que
hacemos, ese amar a los que tenemos cerca que los podemos señalar y podemos
decir: “Es esta persona y ésta y ésta con
la que he de cumplir una misión, y amamos”. En definitiva, la cualidad
fundamental para saber si estamos en nuestra misión es saber si enamorados
estamos de ella, de ese hacer, de ese estar. Si no estamos enamorados, si no
amamos eso que, en lo que nos encontramos, probablemente no estemos en la
misión, en la misión que se nos ha encomendado. Así que tenemos un termómetro,
dentro de nuestra incultura de amor, tenemos detalles que nos indican cómo el
amor nos llama, nos atrae, nos recoge, digamos que a veces nos atrapa... Y lo
peor que puede hacerse es querer poseerlo. Y cuando no se le posee,
evidentemente, el amor nos libera, nos auxilia, nos ayuda, nos cuida, nos… nos
da el aliento, nos da la vida, porque eso es vivir: amar. Eso es vivir: amar.
Sí,
ésa sería la primera consideración en torno a la su-misión, a la sumisión.
Otra
consideración importante, ya en la palabra completa, la sumisión, es que al
descubrir todo lo que tenemos, al ver una noche estrellada, al conocer cuatro
cosas de astronomía, nos damos cuenta de que no nos queda otro remedio que ser
sumisos, que lo que se está produciendo en este lugar, en este momento, en el
universo, véase planeta Tierra, es un acontecimiento insólito, ¡insólito!, un
acontecimiento singular ¿no?, que nos coloca en un nivel verdaderamente
asombrosamente increíble, asombrosamente increíble.
Entonces,
en ese sentido tenemos que darnos cuenta de que estamos en un instante… en un
instante verdaderamente enamorado. Porque cuando contemplamos esas estrellas y
sin que nos digan si ésa es la Osa Mayor, la Osa Menor, Rigel, Casiopea… Está
bien, está bien racionalizar pero ¡toda esa bóveda celeste! Y todas las fotos
que nos manda el Hubble, ¡no, no, no!, ¡eso es para derretirse!, ¡derretirse!,
y decir: “Pero si yo… si yo sólo puedo
ser sumiso ante la Creación; no tengo otra opción. ¿Cómo puedo atreverme a ser
ególatra, idólatra, soberbio, vanidoso, importante personal?, ¿cómo me puedo
atrever después de ver esto?” Después de ver un bosque o después de ver un
tronco de una secuoya, que abarca cincuenta hombres y no son capaces de
rodearlo, un árbol milenario que está ahí. O después de ver un bicentenario
olivo con sus olivas vivientes. O ver o tener la oportunidad de hacer una
inmersión submarina y ver una barrera de coral y ver que en ningún caso, ¡en
ningún caso!... cuando contemplamos por ejemplo una orquídea, una orquídea
negra, o de cualquier otro color, vemos que en ningún caso la belleza que
exhala nuestro entorno, que en ningún caso podemos nosotros ni siquiera
acercarnos a esa belleza. Y éste es un punto importante para la sumisión, ¿no?
Bien podremos arreglarnos, pintarnos, vestirnos… pero, pero… no, nunca
llegaremos a la belleza inigualable de una aurora boreal o de la majestuosidad
de una montaña o la exuberancia vital de una selva o un bosque que nos acoge
con solemnidad, ¡y qué decir de un mar que nos permite navegar! Son de una
belleza tan absolutamente desbordante que no nos queda más remedio que ser
sumisos. No nos queda más remedio porque, aunque no queramos, nos podemos
comparar y si vemos andar a un ciempiés o a un lagarto… o a un elefante,
¡imagínense!, ese ritmo, ese… Si vemos nadar a un tiburón, a una ballena o a un
delfín. ¿Podremos nosotros ponerle una gracia en esos andares a alguno de esos
animales, comparativamente? ¿Podemos, en el mejor de los casos, el mejor
bailarín, podría hacer algo tan naturalmente bello como el salto de un delfín?
Imitando a la danza del lago de los cisnes, ¿se ha visto alguna vez a un cisne
en un lago por la noche brillante y relucientemente blanco, como se mueve, como
se desplaza…? El hombre lo intenta en esa maravillosa obra de “El lago de los
cisnes” de Tchaikovski pero, ¡pero nada!, ¡nada igualable ni parecido!, por
mucho que se pongan el tutú y dancen horas y horas de ensayo, comparable a ver
ese cisne en una noche oscura, moverse y desplazarse con la elegancia de su
cuello. Toda esa belleza, que pasamos por ella como si no… como si no
existiera, tiene que hacernos recapacitar.
Y
esa es la recomendación del dictamen del oráculo de este mes, para que seamos
sumisos, y quitemos esa egolatría, idolatría, soberbia, vanidad, importancia
personal, y nos coloquemos en ese servicio y en esa misión que debemos hacer. Y
si estamos en nuestra misión no entraremos en las misiones de otros, no
invadiremos los territorios de otros, dejaremos aparte los prejuicios, las
críticas. Porque bastante tendremos con cumplir con nuestra misión.
Y
qué decir de la sentencia: “La Grandeza de lo Inexplicable”, porque todo esto
que hemos dicho de la belleza, lo último, es inexplicable ¿no? Es inexplicable
el diseño que tiene un mosquito por ejemplo, es… es… ¿Cómo explico ese diseño?
¿Cómo explico el diseño de una granada?, como fruto, ¿no? ¿Cómo explicar la
belleza incomparable de la flor de cactus o de un nenúfar en un estanque?,
¿cómo…? ¿Cómo explicar la espiga de trigo, así, tan sutil, tan elegante, tan
danzarina con el viento, tan creadoramente generosa, que ha dado cien o mil
granos por uno que plantamos?, ¿cómo? Es inexplicable.
Por
eso cuando el ser humano, en su vanidad, en su soberbia, en su orgullo, en su
importancia personal, en su cientificismo, en su “verdad” –entre comillas-,
trata de explicar lo inexplicable queda muy torpe, queda muy feo, ¡muy feo!
Cuando trata, por ejemplo, de explicar el origen del universo, ¡queda muy feo!,
compararlo con un disparo: “¡big-bang!” o un “big-crash”. Queda muy feo porque
demuestra una ignorancia increíble ¿no? Ha hecho un modelo a su imagen y
semejanza, de su concepción y de su capacitación de conocimientos actuales, y
con ese modelo se maneja. Igual que hace el modelo de que son las tres, son las
cuatro, estamos en julio, estamos en agosto, estamos en septiembre… Modelos
para autoesclavizarse. No se atreve todavía, el humano, salvo cuando poetiza,
no se atreve a liberarse de su corsé de normas y costumbres. No, no alcanza a
descubrirse él a sí mismo como inexplicable. Al ver lo inexplicable del
universo y de la creación, y él estar y ser parte de la creación, uno mismo se
declara “inexplicable”. ¿Y cuántas veces no nos hemos dicho a nosotros mismos?:
-Es que… no me entiendo, no me
entiendo. A veces no me comprendo…
Inexplicable.
Pero a la vez ¡fantástico! Porque ¿qué es lo que nos hace lo inexplicable
cuando somos realmente austeros y estamos en nuestra misión? Nos hace buscar y
buscar. ¿Y qué descubrimos cuando buscamos? ¡Que nos encuentran! Nosotros no
descubrimos nada, ¡nos encuentran!, ¡nos permiten ver! Ésta es otra forma de
explicar las cosas, por supuesto bajo la óptica de la Sumisión, del oráculo en
el que estamos inmersos, por supuesto. No se trata de procesos racionales,
estamos hablando del I-Ching.
Entonces
lo inexplicable, la Grandeza de lo Inexplicable reside en el impulso que nos
promueve para buscar. Y qué gracioso está cuando se dice por ejemplo: “¡Eureka!, ¡lo encontré!” ¡No! No has
encontrado nada. ¡Te han dejado que encuentres! Te han encontrado a ti. Te ha
encontrado a ti la Providencia, te ha encontrado a ti la Benevolencia de la
Creación. Y eso es… una sensación inexplicable, de una belleza asombrosa.
Cuando no nos atribuimos a nosotros la autoría “de” sino nos atribuimos el
privilegio de que nos han encontrado ¡y nos han dejado ver!... algo que para otros
estaba oculto o que para todos estaba oculto. Nos han inspirado. Pero no hemos
sido nosotros con nuestra capacitación orgánica los que hemos descubierto…
¡No!, ¡no! Nos han ido dejando ver esto y aquello, y nosotros hemos ido
componiendo esto o lo otro, a veces con mucha torpeza, otras veces con cierta
habilidad, y la mayoría de las veces con poca belleza.
Pero
en cambio, si hacemos de lo inexplicable algo grandioso, estaremos en
condiciones evidentemente de ser una humanidad sumisa, una humanidad que sabe
hacer su misión, que sabe cumplir su misión, que sabe ser fiel a su vocación, y
que disfruta y hace disfrutar con su testimonio a los demás, dándose por “feo”
y contemplándose la belleza que le rodea. Y así es capaz de exclamar su sonrisa
y su amor hasta donde pueda llegar, que eso es lo que le convierte en un ser
bello.
Y
hasta ahí. Tenemos que dejarlo. Encantado de poder seguir pero otro programa
aprieta y viene.
Gracias.
Gracias a todos por haber estado con nosotros. Saludos cordiales y hasta… hasta
nuestro cuarto encuentro que pronto nos veremos. Gracias. Gracias a nuestro
equipo técnico, mejor que nunca. Y, bueno, no se vayan, y aguarden a las
imágenes que de seguro nos van a recrear esta culminación.
Buenas
tardes y hasta siempre.
HEXAGRAMA
ORACULAR
Este
hexagrama esta conformado por el trigrama de “La Creatividad del Cielo”, por
sobre el trigrama de “la Receptividad de la Tierra”.
RESONADORES ORACULARES
54 V Zhi4
Bian3 “Dirección Constante”
Localización: A la altura del 4º agujero sacro, a 3
cun lateral a la
línea media. (****)
Indicaciones: Ciáticas. (****)
21 SJ Er3
Men2 “Puerta del Oído”
Localización: En la depresión que se
halla entre la oreja y la
articulación de la mandíbula,
delante de la incisura
superior del trago. (****)
Indicaciones: Autismo, sordera
neurosensorial. (****)
9 IG Shang4 Lian2 “Ángulo Ascendente”
Localización:
Con el codo doblado, 3 cun inferior al extremo del
pliegue
de flexión, en el borde del radio. (****)
Indicaciones:
Tendinitis. (****)
10 P Yu2 Ji4 “El espacio del Ser” “El Rincón del
Pescado”
Localización:
En el centro de la eminencia tenar, en un hueco en
el
borde interno del hueso metacarpiano. (****)
Indicaciones:
Resonador Manantial – Fuego; síndrome de
túnel carpiano. (****)
CANTO DE
LOS RESONADORES ORACULARES
En
Dirección Constante
Y en
Angulo Ascendente
Se abre
La Puerta del Oído
Y en Sumisión,
frente a La Grandeza de lo Inexplicable
se
manifieste El espacio del Ser.
TRIPLETAS
ORACULARES
CCC
Glicina
La glicina es el más simple de los 20 diferentes
aminoácidos usados como bloques edificantes de proteínas para el cuerpo.
Funciona en armonía con la glutamina, una sustancia que juega un papel
importante en la función cerebral. Es un aminoácido no esencial utilizado por
el organismo para sintetizar proteínas
Alimentos que la contienen
Está presente en alimentos como el pescado, la carne o
los productos lácteos.
Funciones de la glicina
La glicina promueve la salud del sistema digestivo al
actuar como un antiácido, mantiene la próstata sana, contribuye a la correcta
actividad del sistema inmunológico y es un aminoácido útil para reparar tejidos
dañados favoreciendo su curación. La glicina se encuentra en grandes cantidades
en el colágeno, que es una proteína estructural que promueve la fuerza y la
elasticidad de la piel. De hecho, es el elemento principal que compone la
fascia, el cartílago, los ligamentos, los tendones y los huesos, y la proteína
más abundante en el cuerpo humano.
CCC
Prolina
Es un aminoácido apolar no aromático. La prolina está
involucrada en la producción del colágeno. Está también relacionada con la
reparación y mantenimiento de los músculos y los huesos. La prolina es la que
confiere flexibilidad a la molécula de inmunoglobulina en la región de bisagra
de esta.
Alimentos que la contienen
La prolina se encuentra en alimentos de origen animal
como carnes, pescados, lácteos y huevos. También puede encontrarse en alimentos
de origen vegetal como legumbres, semillas, cereales integrales, frutas, frutos
secos y vegetales ricos en vitamina C.
Funciones de la prolina
La prolina se utiliza como ayuda en el tratamiento de las
enfermedades articulares por su implicación en la síntesis de colágeno. Algunas
de estas situaciones son artritis, esguinces, lesiones en ligamentos, lumbago,
luxaciones, tendinitis y tortícolis.
También gracias a su implicación en la síntesis de
colágeno se utiliza para mejorar la textura de la piel y reducir los efectos
del envejecimiento, ayudar en la cicatrización de heridas, úlceras y quemaduras
o como protector cardiovascular inhibiendo la descomposición del colágeno
arterial. En un artículo publicado por Linus Pauling, «Théorie unifiée des
maladies cardiovasculaires», este célebre autor explicaba que la placa de
ateroma no es la causa primaria de enfermedades cardiovasculares, sino que es
un medio que el organismo pone en marcha para reforzar las paredes de las
arterias debilitadas por la falta de colágeno.
La prolina también confiere flexibilidad a la molécula de
inmunoglobulina y también se utiliza en combinación con vitamina C y lisina en
los tratamientos de impotencia o frigidez. La prolina también se utiliza en
casos de dolencias del aparato digestivo como parásitos o infecciones
intestinales.
ASALTO POÉTICO
16-09-2021 J.L.
Padilla
¿Fue el transcurrir
o el “a destiempo”
el que apareció de repente?
¿Fue el transcurrir
o el “a destiempo”
el que nos coincidió para divergir, para desatender
para atendernos,
para caer inquietos como una gota en el tejado
que se precipita al vacío anhelando llegar al suelo?
¿Es el destiempo
o a destiempo,
lo que nos lleva a no coincidir?
Como si de universos distintos fuéramos,
como si la experiencia de uno, inútil fuera para otros.
A destiempo,
¡se ve con el tiempo!,
que no fue lo oportuno,
y qué fue lo que realmente llegó a tiempo.
Pero quizás…
no hay tiempos para algo…
o para… nada.
Probablemente el impostor enmascarado del tiempo
lo justifica todo.
Porque si en verdad fuera cierto,
todo estaría a tiempo.
Pero al estar a destiempo,
es señal de que nuestros conscientes sentidos y sentires
nada tienen que ver con el tiempo
y sí con el transcurrir
de lo que sucede,
de lo que ocurre.
A veces…
pareciera que el canto de los pájaros es mudo
o que el sonido del viento es el silencio.
A destiempo…
analizamos
y pensamos lo que es mejor o peor.
Y siempre a destiempo
llegamos a la conclusión de que estamos fuera del tiempo.
Parece que ninguno hubiéramos llegado “en punto”.
Parece como si todo lo viviente
y lo de procedencia de humanidad
estuviera a destiempo,
como una treta…
como una treta de la nube que amaga y no descarga,
como una treta del rayo que oculta el trueno
¿o quién oculta a quién?
A destiempo…
si consideramos el tiempo
y dejamos de transcurrir,
siempre estaremos fuera del momento,
siempre estaremos en el momento adecuado, en el sitio
inadecuado.
Nos salva la Suerte…
que nos habla de posibles
y de imposibles.
Posibles:
esos aconteceres de razones,
¡ay!,
sierras melladas.
E imposibles:
¡ay!,
versos dorados
desde La Nada.
A destiempo se está
Siempre que asumamos el tiempo.
Un silbido…
(silba)
nos coloca en el sintiempo,
no tenemos que dar nada,
como el destiempo,
tan sólo vivir,
¡tan sólo vivir!,
con la única referencia del sentir:
inevitable acontecer,
por momentos desquiciantes,
por otros, tristes,
por otros, lúgubres,
por otros, desesperantes,
por algunos, sonrientes…
y algunos dicen que “felices”.
¡Abran juego señores!,
el destiempo desatinado está instaurado.
No pretendan arreglarlo,
con el tiempo no hay nunca acuerdos.
Referencias:
(*) "Diccionario español de la lengua china” –
Mateos, Fernando; Miguel Otegui; Ignacio Arrizabalaga.
(**)
“Chinese Characters” – Dr. L. Wieger.
(***)
Yellow Bridge - https://www.yellowbridge.com/chinese/dictionary.php
(****) "El Canto de los 20 senderos y sus
valles" Dr. José Luis Padilla
Corral